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Foto cortesía del CONOC
En una conferencia de prensa el 3 de febrero de 2014, el Consejo Nacional de Organizaciones Campesinas (CONOC) de México manifestó su preocupación de que la próxima reforma del campo en México privatice los territorios y tierras de las comunidades campesinas e indígenas, violando sus derechos a favor de los intereses de las grandes empresas agroalimentarias y mineras.
La conferencia de prensa se realizó como respuesta al anuncio del Presidente de México Enrique Peña Nieto el 6 de enero de que el gobierno federal promovería una “profunda reforma del campo” este año. Declaró que el gobierno federal impulsaría la transformación del marco jurídico del sector agropecuaria en 2014. “Si queremos un México moderno y exitoso, es indispensable un campo igualmente moderno y exitoso”, dijo Peña Nieto.
Enrique Martínez y Martínez, Secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA), dijo que “el 77% [de la superficie cultivable de México] son pequeñas parcelas de menos de cinco hectáreas y esto hace inviable una producción agropecuaria productiva”, y que las parcelas deben “hacer clusters”, o aglomerarse, para disminuir costes y hacerse más competitivas económicamente. Dado que solo el 3% de las tierras comunes han elegido a privatizarse desde 1992, SAGARPA buscará reformas judiciales para permitir un tránsito más rápido de la propiedad social a la privada, según CONOC.
Aunque aún se desconocen los detalles de la señalada reforma del campo, CONOC teme que signifique una mayor privatización de tierras comunes, de las que dependen las comunidades campesinas. Desde 1917 hasta 1992, el gobierno de México redistribuyó más del 50% de las tierras cultivables del país a los ejidos y comunidades, sistemas de tenencia de tierra común o social, pero desde entonces ha empezado a permitir la privatización de ciertos tierras comunes.
“Es inaceptable que desde el Gobierno Federal cuando se habla de una reforma para el campo se prioricen los cambios legales a la tenencia de la tierra que permitirían facilitar la privatización de los territorios y tierras de los pueblos campesinos e indígenas, además de facilitar el acceso y apropiación de tierras por parte de mineras, hidroeléctricas, eólicas, forestales, turísticas, inmobiliarias, etc.”, declaró CONOC en un comunicado.
Para respetar a los territorios y tierras de los pueblos campesinos e indígenas, CONOC manifestó los principios siguientes:
- Deben detenerse las modificaciones legales a la tenencia de la tierra que afectarían a los pueblos campesinos e indígenas.
- Respeto a los territorios y tierras de los pueblos campesinos e indígenas y que se cancelen las concesiones que les afectan otorgadas empresas mineras, hidroeléctricas, eólicas, forestales, turísticas, inmobiliarias, etc.
- Políticas de fomento a la producción en el campo y para el mejoramiento de las condiciones de vida de las familias campesinas.
- Exigimos un sistema de precios remunerativos garantizados y certidumbre en la comercialización de nuestras cosechas.
- Fomento a la asociación de los campesinos respetando sus procesos autónomos y autogestivos, su funcionamiento en condiciones de libertad, igualdad y democracia.
Para más información, véase la Declaración del CONOC y el sitio web de la organización.